23 diciembre, 2007

Ahora que cambia la tendencia.*

*(artículo para Capgros.com)
La gráfica de la evolución trimestral de las tasas de crecimiento anual del P.I.B. español nos indica que después de un crecimiento continuado desde el 2002 hasta llegar en el primer trimestre de este año al 4,1%, ahora empieza a bajar.

(Fuente: INE)



Desde la crisis de las hipotecas subprime de los EE.UU. en el pasado verano el debate es acalorado sobre la intensidad de la crisis que se divisaba. Ahora ya empezamos a tener algunos datos concretos que indican tendencias, pero el debate continúa. ¿Caerá en picado, o será un aterrizaje suave? He apostado por el segundo escenario. Creo que hay que tener más confianza en el país y en su gente por encima de las críticas catastrofistas que generan desconfianza. Es lógico que yo piense así, como también lo debe de ser que la oposición, y más en periodo electoral, manifiesten que cree en la otra alternativa.

En este panorama hay que reseñar algunos datos, tres concretamente:

1. Las consecuencias de la estabilidad presupuestaría a lo largo del ciclo permiten afrontar un nuevo periodo de menor crecimiento (que no recesión, hay que decirlo y recordarlo) con un del porcentajes más bajos de deuda pública sobre el PIB del países de la Unión Europea. El 36,2%, previsión al final de este año. También hay que hablar del Fondo de Reserva de las pensiones de la Seguridad Social que será a finales del año próximo de más de 52,3 mil millones de euros.

2. La aportación de la formación bruta de capital fijo en bienes de equipo al crecimiento del PIB de los últimos tiempos con tasas trimestrales de crecimiento de más del 10% (10,5% en promedio en los últimos tres años). Esto es indicativo de la confianza de los emprendedores y empresarios en el potencial de nuestra economía y que se deberá traducir en futuros crecimientos o mantenimiento de la tasa de crecimiento del PIB.
3. Las aportaciones presupuestarías de estos últimos años a las partidas de I+D+i. De 2,9 mil millones de euros en el 2004 a los 7,7 mil millones que hay previstos en el presupuesto del 2008, lo que representa haber aumentado estas partidas en 2,6 veces. Del aprovechamiento correcto de estas cantidades se deberá deducir más adelante más solidez y un cambio del patrón de crecimiento de nuestra economía haciéndola más competitiva.

Todo esto en las perspectivas de futuro. Mientras tanto, en el presente, la situación presenta algún que otro dato económico que también hay que reseñar:

1. Acabamos de pasar a Italia en renta per càpita.
2. El año pasado, 2006, España fue el tercer inversor mundial en el exterior y el noveno en recibir inversiones exteriores.
3. Fruto de la situación económica iremos a las elecciones con debate sobre los gastos y los ingresos presupuestarios, como corresponde.

Creo, como he tenido ocasión de decir varías veces en sede parlamentaria, que el Gobierno, el grupo parlamentario que lo apoya y del que formo parte tienen confianza en el país y su gente.

Desterremos viejos tópicos y lugares comunes sobre lo qué somos y lo qué podemos hacer colectivamente. Sin decaer la atención o caer en la complacencia. Mirando hacia adelante confiados en que tenemos capacidad para resolver los problemas –que los hay- que sufren hoy o tendrán en el futuro nuestros conciudadanos/as. Muchos nos miran con envidia.

Madrid, 19 de diciembre.