29 septiembre, 2011

En el Consejo de Federación.

Se celebra Consejo de Federación de los socialistas del Maresme para recoger las propuestas de las Agrupaciones de posibles candidatos para ir a las listas de nuestra circunscripción en las próximas elecciones generales, debatirlas (es un decir) y trasladar la resolución pertinente a la Comisión nacional de listas.

Agradezco las muestras de aprecio expresadas y los obsequios que me son entregados. Tendré de ellas un gran recuerdo.

Aprovecho para despedirme de los cargos orgánicos.

"Compañeras, compañeros:


El pasado 15 de julio fui a ver a nuestro todavía Primero Secretario, José Montilla, para decirle que se había terminado, que me iba a mi casa, que ya tenía bastante. El primero de junio había escrito a mi blog: “Bajo del barco de siempre y subo al pequeño bote de mi historia y mi dignidad”.


En los últimos tiempos me he encontrado muy incómodo en nuestro partido, en sus estrategias, en su organización, en muchas de sus decisiones y así lo he manifestado, como es conocido. A su vez, la organización del partido también me ha manifestado su incomodidad por mis posiciones, especialmente por hacerlas públicas. “¡Ah, el blog del Manel Mas!” Las opiniones heterodoxas nunca han cotizado al alza en las organizaciones.


Me retiro. Hacia casa. Ya habéis visto que no he hecho ningún intento de tener posibilidades de continuar ostentando cargos públicos. Ya me retiré voluntariamente de los orgánicos. No tengo ningunas ganas de combate. Nunca he hecho combate orgánico para obtener ningún cargo. Ahora, a la edad que ya tengo, menos.


Han sido muchos años, más de 32. He sido concejal, Alcalde y representante municipalista y ahora últimamente Diputado en Cortes. Desde siempre he sido miembro del Consejo Nacional. Más de media vida de la que estoy muy satisfecho de lo que he conseguido hacer por mis ideales. Ya soy mayor, aunque no me siento viejo, y quizás es hora que me aparte, y más cuando mi voz discordante es marginal y solitaria, lo que me genera dudas sobre si no estoy desacertado.


Con tristeza para mí, puesto que esta ha sido mi vida que tendré que reconducir, pero también con tristeza por las perspectivas que veo en nuestra organización a la que no sé si podré ayudar a mejorar mucho.


Puedo decir con satisfacción que siempre que he participado o encabezado una lista socialista en unas elecciones los ciudadanos/as lo han hecho ganadora. Pero, ya está. Se ha acabado.


Permitidme en este momento agradeceros la confianza que me habéis otorgado en todos estos años, vosotros y los órganos correspondientes del Partido. También agradeceros la paciencia con que me habéis soportado en este tiempo y pediros excusas por las incomodidades y molestias que os he podido ocasionar.


Quiero acabar con una pequeña metáfora. En los años 60, los Planes de Reconversión textil estimulaban la destrucción de maquinaría obsoleta para modernizar las industrias. Mi padre recuperó de un trapero, de la chatarra, una máquina para bobinar hilo que recuerdo le ayudé a volver a montar pieza a pieza y que sirvió después unos cuántos años más. Sí, muy marginalmente, pero todavía fue muy útil.


Nada más. Gracias."


Mataró, 29 de septiembre.

26 septiembre, 2011

Ocioso*

*(vid. RAE: Desocupado o exento de hacer cosa que le obligue)

Con la publicación del Real Decreto de disolución de Las Cortes Generales dejo, automáticamente, de ser Diputado, cargo que conseguí en las elecciones generales del 2004 y mantuve en las del 2008 hasta hoy mismo.

Ahora estoy ocioso, aunque espero no convertirme, no ser, un ocioso. (Gracias, Montse Palma, por la apreciación, espero verte en tu Ampurdán). Todavía me esperan unos días de poner orden. De papeles, de documentos, de recuerdos,…

Ya he guardado algunas identificaciones: el carné de Diputado, por ejemplo, y su versión digital que he usado menos todavía. La tarjeta del servicio de taxi de Madrid, y la VISA para comprar billetes de avión y pasar peajes de autopista. La de identificación del vehículo para el aparcamiento del Palacio del Congreso. Supongo que también la tarjeta del aparcamiento del aeropuerto. La de Iberia Plus le queda un viaje, si quiero volar ahora tendré que echar mano de los puntos acumulados.

No tengo ninguna pena por ello, eran para el trabajo que ya no tengo y por lo tanto se amortizan junto a él. Tendré que corregir la firma de respuesta en el ordenador. Sí, la antefirma con el cargo, el nombre y el teléfono de mi asistente y la dirección electrónica del Congreso (seguramente irá detrás, camino del desagüe, la página personal). Vaya, pero, algún trabajillo para los próximos días

Me he apuntado a comprar, por el precio residual, el ordenador portátil. Supongo que algún servicio me podrá dar. Dice que nos dan el teléfono. El terminal, no la línea. Tendré que ir a negociar condiciones para este servicio más la conexión a Internet. Pero bueno, los requerimientos ya serán menores.

Tengo algún trabajo posible entre manos para continuar activo que veremos qué dará de sí, y buscaré algo más. No creo que a mi edad, y condición, encuentre muchas oportunidades profesionales, pero posiblemente alguna en el campo del voluntariado, eso sí, como “bénévolant” que dicen los franceses. Estoy a disposición si hay alguien que cree que le puedo echar una mano.

Pero, ya tengo concertadas, en compañía, salidas muy continuadas de bicicleta y de caminar. Vete por dónde, no será difícil este año hacer más de los 2.000 kilómetros que me propuse hacer en bici. Ejercicio barato y saludable. No terminaré los libros que tengo para leer en casa (y todavía compro otros nuevos) y tengo para digitalizar todos los viejos vinilos y cassettes de música. He cogido gusto en escribir, que no es el mismo que publicar.

El teléfono dejará de sonar, los mails se irán reduciendo, habrá que darse de baja de unas cuántas cosas a las que por militancia, o para ayudar, estaba apuntado (hay que reducir gastos puesto que también se reducirán los ingresos). Habrá que afinar el presupuesto, pero vaya, esto no es muy preocupante. Ya estoy en la edad de vender y no de comprar.

Nada, nueva vida. Y que dure.



Mataró, 26 de septiembre.

22 septiembre, 2011

Otoño.


Empieza un nuevo camino lleno de hojas secas que caerán de los árboles.
La vida continua, y después del invierno volverá la primavera.

Mataró, 22 de septiembre.

Últimas letras desde el escaño.

El martes bajé de la Tribuna mientras los compañeros del PSC presentes en el hemiciclo me aplaudían haciendo de claque. Gracias, compañeros y compañeras. Fue mi última intervención en la Cámara de los Diputados. Me pidieron defender la posición del GPS en una Proposición de Ley de los parlamentarios a nuestra izquierda sobre aumentar los impuestos. Ya fuera de tiempo, puesto que no tiene recorrido temporal para ser tramitada y reiterativa, puesto que hemos hablado mucho de ello.

Esta semana voy recapitulando. Entrando y saliendo del Palacio, del despacho, por las calles cercanas, con los compañeros/as,… son días de despedida y recuerdo. Ya no volveré a vivir estas cosas. Sí, habrá que volver algún día, próximamente, para acabar de limpiar el despacho y el ordenador, pero ya he hecho unos cuantos viajes al contenedor de papel. Todavía guardaba documentos del trabajo del primer mandato que hice: Los temas de Industria, comercio y turismo y los de los Presupuestos de aquellos años 2004-2008. A la basura, como seguirán también los que he guardado de este mandato de las relaciones con el Tribunal de Cuentas. Comidas y cenas también de despedida: con todos los miembros del PSC, diputados/as y senadores/as con Carme, la Ministra; con los compañeros del T.Cu.; con los y las más cercanos/as, con los que hemos compartido tantas cosas. Seguro que me dejaré alguien y siempre tendré el pesar de no haberme despedido convenientemente.

Al tener la oportunidad de estar en la Tribuna, el martes, pude desde allá despedirme de toda la Cámara aunque en aquel momento estuviera bastante vacía. Queda la despedida en el Diario de Sesiones y esto me ahorra dirigirme individualmente a los compañeros/as y colegas varios. Un recuerdo empapado de agradecimiento también por todo el personal auxiliar que me han ayudado o acompañado estos años, Teresa, Susana, Lucía y todas las/los vuestros compañeras y compañeros.


"Señora presidenta, me permitirá que agote mi tiempo despidiéndome de la Cámara. Es mi última intervención en el Pleno ante los diputados y diputadas, y quiero transmitirles el sentimiento que me llevo a la hora de irme, que es el orgullo de haber sido un representante de los ciudadanos y ciudadanas en el Congreso de los Diputados y haber contribuido, supongo que con un granito de arena, como cada uno hacemos en nuestro trabajo cotidiano, en la convivencia de nuestra colectividad.

Muchas gracias, y deseo suerte a todo el mundo. (Aplausos.)

La señora VICEPRESIDENTA (Cunillera i Mestres): Muchas gracias, señor Mas."

Adiós con el corazón, que con el alma no puedo…

Día de despedidas hoy, en la Tribuna, en los pasillos, en el bar del hemiciclo,... me llevo grandes recuerdos y grandes vivencias y el orgullo de haber sido unos cuántos años un Padre de la Patria, un padre y servidor de mi colectividad.




Madrid, 22 de septiembre. Hemiciclo del Palacio del Congreso de los Diputados.

20 septiembre, 2011

Seseña y final.

Habitualmente no he transcrito en este blog las intervenciones que he realizado en el Congreso de los Diputados. Están todas ellas colgadas en la red a través de la web del Congreso. De fácil acceso, sólo hay que buscarlas para tener constancia de lo que he dicho y de lo que he hecho.

Sin embargo, dado que estamos en las postrimerías y aunque sea un poco larga, quiero dejar colgada en el blog parte de la última intervención que he hecho en la Comisión Mixta para las relaciones con el Tribunal de Cuentas, “mí” Comisión en estos últimos años de trabajo parlamentaría de la que he sido portavoz del GPS.

La primera parte va de la propuesta de resolución que presenta el GPS sobre el informe de fiscalización del Ayuntamiento de Seseña (se podrá ver al apartado de intervenciones) y la segunda parte –que es la que transcribo- es la de la despida de la Comisión.

"......
Dicho esto, y como colofón a mi intervención. Estamos en la última sesión de esta Comisión Mixta y es natural hacer un muy breve balance de nuestro trabajo. Creo que hay que valorarlo positivamente. En estos prácticamente tres años, la Comisión arrancó tarde y terminamos antes de tiempo, hemos visto y dilucidado más de cien informes realizados por el T.Cu. No dejamos pendientes por resolver informes de fiscalización anteriores al año 2010 y algunos relevantes, como la Cuenta General del 2008, entrados en el registro de Las Cortes con posterioridad, también están resueltos. Hemos visto asuntos muy diversos de la Administración Pública española en sus diferentes niveles. Las propuestas de resolución que hemos aprobado elevar a los niveles ejecutivos del Gobierno lo han sido en una gran mayoría por unanimidad, transaccionando las distintas propuestas que los grupos parlamentarios presentes en la Comisión han ido presentando. Quiero destacar especialmente las propuestas de resolución de las Cuentas Generales del Estado del 2004 al 2008, transaccionadas por todos los grupos, propuestas conjuntamente y aprobadas por unanimidad en los Plenos del Congreso y del Senado.

El Diario de Sesiones de esta Comisión está lleno de referencias positivas al trabajo del Tribunal de Cuentas y del reconocimiento por parte de todos los grupos presentes a su labor. Quiero reiterar otra vez, en este momento, el reconocimiento del grupo parlamentario socialista a la labor del Tribunal de Cuentas, especialmente a través de la figura de su Presidente, Don Manuel Núñez.

Aunque no quisiera pasar por alto una desazón que tiene este portavoz que quizás será compartida, o no, por otros componentes de esta Comisión. Las bases normativas del funcionamiento del Tribunal de Cuentas fueron establecidas al inicio del actual período democrático, a inicios de los años ochenta del siglo pasado. Ha llovido mucho desde entonces y han cambiado mucho los tiempos y los días. Creo que es el momento de empezar a revisar, o como mínimo a repensar, la adaptación de aquellas bases normativas a los tiempos y los días de hoy en la perspectiva de los inminentes tiempos y días del futuro.

Quiero agradecer, aquí, el trabajo y el entendimiento conseguida entre los portavoces de los grupos parlamentarios presentes: el Sr. Ramón Aguirre del grupo Popular y la Sra. Inmaculada Riera del grupo de Convergència i Unió. Ya dejamos, todos, constancia en el diario de sesiones de nuestro agradecimiento al senador navarro del grupo mixto del Senado, Sr. Tuñón. Este portavoz quiere dejar especial constancia del trabajo de la Sra. Presidenta de la Comisión, mi querida compañera Isabel Pozuelo, que dirigió convenientemente los trabajos de la misma y con quien fue para mí un placer colaborar, junto con los restantes miembros de la mesa y el Sr. Letrado y cuerpo técnico de la Comisión.

Debo tener un especial agradecimiento, como portavoz, a todos mis compañeros y compañeras del grupo socialista en la Comisión. A los que pertenecen a ella y a aquellos que no a los que les encargué algún tema. Especialmente a los que desde la portavocía adjunta, primero el senador Juan Luis Gordo y después la senadora Carmen Sanjurjo, estuvieron siempre a mi lado. Todos en su trabajo cumplieron con su cometido y facilitaron enormemente mi labor. A todos ellos, a todos vosotros, mi agradecimiento y les aseguro que mi grato recuerdo cuando ya, en pocos días, esté fuera de esta casa.

Unas últimas palabras. No creo que ni política, incluso dentro de las propias Cortes Generales, ni mediaticamente, se da a esta Comisión Mixta la relevancia que tiene. Sin embargo, creo que compartimos sus componentes, el convencimiento que el trabajo que realiza es de suma importancia para el funcionamiento de las instituciones democráticas y como garantía para los ciudadanos de que las fiscalizaciones del T.Cu. son analizadas por representantes de la soberanía popular y que a partir de ello se hacen propuestas conducentes a la mejora del funcionamiento y la transparencia de la Administración pública, de la administración de nuestra comunidad. Deseo, pues, que en el futuro el trabajo de esta Comisión Mixta para las relaciones con el Tribunal de Cuentas continúe progresando y prestando los servicios pertinentes que la colectividad le ha encomendado.

Muchas gracias, señora Presidenta, muchas gracias compañeros, colegas, diputados y diputadas, senadores y senadoras.”


 
Madrid, 20 de septiembre.

Día de despedida. Melancolía.


Tengo, hoy, la oportunidad de poder despedirme formalmente en el Congreso. Primero en la reunión del Grupo Parlamentario Socialista. Dado que he de presentar un tema que llevo como representante del grupo en la sesión de la tarde (una Proposición de Ley que presentan el grupos de ERC-IU-ICV y Mixto para aumentar la fiscalidad) aprovecho -después de explicar sucintamente qué posición tendremos y cómo la manifestaremos- para decir unas breves palabras de despedida a los compañeros/as. Más o menos les he dicho lo siguiente:

“Permíteme, Portavoz, despedirme del grupo ya que el jueves me voy para mi casa. Fue un placer conoceros y estar con todos vosotros. Ha sido un placer trabajar con vosotros. Gracias por lo que me habéis dado. Gracias por lo que me habéis permito colaborar en el trabajo parlamentario y en el proyecto. Como dijo el poeta: En la vida todo es ir a lo que el tiempo deshace.”

Después tendré la oportunidad de hacerlo en la última Comisión Mixta por las relaciones con el Tribunal de Cuentas y por la tarde en el Pleno del Congreso.

Madrid, 20 de septiembre.