No entendí porque en 2005 en el renovado (?) acto de celebración oficial del 11 de septiembre, con pretensiones “noucentistes”, se incluyó la canción tradicional catalana “L’emigrant” (A. Vives / J. Verdaguer).
Esta canción representó algo en la Cataluña de finales del siglo XIX y comienzos del XX, cuando mucha gente fue a hacer las Américas intentando buscar mejores perspectivas personales que las que se les ofrecían aquí.
Ahora, a la inversa, es bien conocido que nos hemos convertido en una tierra de inmigrantes, de gente que de cualquier parte del mundo, principalmente del mundo pobre es preciso decir, llegan en Cataluña para ganarse la vida. Por esto me parece anacrónico mantener “L’emigrant” como una canción remarcable, al menos institucionalmente, a no ser que se hable de una Catalunya que ya no existe, que quizás es dónde están algunos.
Sin embargo, me llega la noticia de que a mi hermano Jaume, que ya hace tiempo fue a México a ganarse la vida, le han otorgado la residencia definitiva como inmigrante. Los técnicos textiles pueden continuar ganándose las “habas” en lugares dónde todavía hay empresas como las que había aquí tiempos atrás. Algunos de ellos ya trabajan en la China...
No hay comentarios:
Publicar un comentario